Andrés Vázquez ha engrandecido hoy su leyenda como matador de toros al ser el primer diestro que sale al ruedo con 80 años, cumplidos esta semana, en el cincuenta aniversario de su alternativa.
El respetable se entregó al maestro desde el primer momento y en cuanto pisó el ruedo, la plaza le brindó una cálida ovación con el público en pie.
Tras el primer pase con el capote, el maestro Vázquez recibió la primera ovación y los olé fueron constantes y acompañados de aplausos en cada movimiento del octogenario diestro.
Después del picador y aún con el capote, Vázquez llevó a su oponente hasta los medios y la plaza enmudeció ante la agilidad del torero, para estallar en aplausos nuevamente cuando se giró hacia el respetable.
Con la muleta Vázquez toreó siempre en los medios, alternando pases de izquierda y derecha.
A la hora de entrar a matar, el diestro cogió la espada con firmeza y miró al vitorino fijamente. Con la plaza en pie, el maestro elevó un enérgico grito y se lanzó sobre la res. Una estocada fuerte y directa dejó al animal sentenciado.
Vázquez, consciente del éxito de su estocada, se giró de inmediato sonriente y satisfecho hacia los asistentes que ya festejaban la faena.
La plaza aplaudió con énfasis y agitó los pañuelos blancos pidiendo a la presidencia el mayor premio.
En primera fila, el maestro Santiago Martin "El Viti" y el seleccionador nacional de fútbol, Vicente del Bosque, participaron entusiastas en el homenaje a un Andrés Vázquez que no pudo contener la emoción, impulsada por la adrenalina del momento.
La presidencia sacó un pañuelo, pero eso no hizo sino animar aún más al respetable, tan entregado como emocionado estaba Andrés Vázquez, que difícilmente retenía las lágrimas.
Al final tres pañuelos, las dos orejas y el rabo y una grada feliz con la histórica faena que había presenciado.
Andrés Vázquez dio la vuelta al ruedo mientras recibía felicitaciones y halagos. El día histórico del maestro de Villalpando alcanzaba su punto álgido.
A Vázquez le precedió el rejoneador Sergio Vegas, que cortó dos orejas. Tras el maestro salió al ruedo Juan Mora, que cortó una oreja, y después Javier Conde, el más aplaudido de la tarde tras el homenajeado y que cortó dos orejas y el rabo con indulto del novillo.
Cerraron la tarde los novilleros Abierto Durán, que se fue con aplausos, y César Valencia, que cortó dos orejas y fue muy aplaudido.
Todos le brindaron sus faenas al homenajeado, un Andrés Vázquez que ejerció también de maestro de ceremonias y que abandonó a hombros la plaza.
Sergio Vegas, rejoneador, dos orejas.
Andrés Vázquez, dos orejas y rabo.
Juan Mora, una oreja.
Javier Conde, dos orejas y el rabo con indulto del novillo.
Abierto Duran, aplausos.
Cesar Valencia, dos orejas.
Tarde soleada en Zamora con media plaza de asistencia.